El Emirato de Dubai

Dubai es junto con Abu Dhabi,  el más dinámico y conocido a nivel mundial, de los Emiratos del Golfo Pérsico. Junto con otros cinco, conforman los Emiratos Arabes Unidos E.A.U. Ambos recuerdan la pauta de originales edificios y famosos arquitectos que ya hemos señalado en el anterior artículo sobre Qatar.

Fotografía mural del Emir de Dubai, Mohammed bin Rashid al Maktoum. Foto JGP

La Visión de un Emir moderno

Dubai cuenta con  reservas de crudo para unos 10 años. Su emir  - Mohammed bin Rashid al Maktoum –, un hombre inteligente y visionario, ha liderado el proceso de transformación económica para enfrentarse  al momento inevitable en el que el país haya agotado su petróleo.  Un planteamiento clarividente que ha puesto a Dubai en la cúspide de la atención mundial.  Arquitectura, redes de comunicación e industrias especializadas  son la base del iceberg  cuya cima se decora con los edificios que asombran al mundo.

Está claro que ese ambicioso proyecto de transformación  del Emir Rashid pasa también por el turismo. Pero un turismo calificado de 7 estrellas, de gran lujo. No se trata de que el segmento de clientela buscado se centre exclusivamente en esa categoría. Más bien hay en ello un planteamiento de marketing turístico, de posicionamiento de marca. En el ámbito turístico mundial actual, tan amplio, diverso y atractivo, solo con nivel de 7 estrellas se puede llamar verdaderamente la atención. Y en ese concepto se está volcando el país ya que tiene actualmente recursos para ello.

Un urbanismo revolucionario

Diez años separan estas dos imágenes

Estamos ante una impresionante forma de urbanizar el desierto, algo que parece irreal, un sueño imposible. Donde antes solo había puro desierto hoy se levantan autopistas de ocho carriles que enlazan zonas urbanas con extraordinarios edificios, gigantescos centros comerciales, profusión de  lagos y  parques repletos de flores y cubiertos de un césped asombrosamente perfecto. Un impresionante sistema de riego automático proporciona a la ciudad millones de litros diarios  de agua marina desalinizada,  asegurando de este modo  el abastecimiento de sus habitantes  y el  verdor permanente   de este oasis artificial.  

Llegada a Dubai

Todo es inmenso e impresionante desde que se llega al aeropuerto. El  control de pasaportes, en hora punta, puede tener filas enormes en cada uno de sus 20 mostradores; aparte de otros 12 mostradores más para viajeros business, crews, diplomáticos, dubaitíes y residentes. En hora punta, se tardan casi 40 minutos en atravesar el control, que por otra parte es muy sencillo para los turistas europeos, que obtienen un visado

La mayoría de los hoteles ofrecen servicio gratuito de shuttle bus  con el aeropuerto, lo cual evita problemas de búsqueda de taxis, gastos y pérdidas de tiempo.

Llegamos a Dubai dos días antes de comenzar nuestro crucero. Nos alojamos en el Xclusive Hotel Apartments,  en la calle 17B, un excelente aparthotel de la zona nueva, lejos de los grandes rascacielos. Nuestro departamento tenía cocina-comedor, un gran baño, un precioso salón  y un buen  dormitorio todo ello en decoración occidental clásica, con buenas telas y estilo elegante. Personal muy amable en la recepción. El hotel está ubicado muy cerca del centro comercial Burjuman Mall Dubai, que dispone de cafeterías, restaurantes de todo tipo y un gran supermercado con excelentes productos, salvo alcohol obviamente.    

El primer día de estancia en Dubai no paramos y apenas comimos ¡ Había tanto que ver y tan pocas horas ¡. Para aprovechar lo mejor posible el tiempo es aconsejable utilizar el Big Bus City Tour que funciona de 9 a 18 horas y se puede  contratar en cualquier centro comercial y en hoteles. En esos lugares también están las paradas del Bus a lo largo del recorrido.

   

El nuevo Dubai   

El nuevo Dubai es el resultado de convertir una economía basada exclusivamente  en el comercio y el petróleo, en otra esencialmente  orientada al sector servicios  y al turismo de lujo. Dubai ha sabido transformarse en un inmenso centro financiero a medio camino, física y conceptualmente,  entre  Londres y Singapur.  Con la creación de mega parques industriales y tecnológicos, apoyados en ventajas fiscales a las empresas inversoras, un buen número de compañías occidentales ha colocado sus capitales y sus centros de investigación y desarrollo en Dubai.

Ello unido a unas redes de Infraestructuras excelentes, tanto en autopistas urbanas, como en un impactante aeropuerto,  gigantesco centro comercial  en sí mismo, donde están expuestos y  se pueden comprar hasta asombrosos coches,  o en  los puertos, por ejemplo  el de cruceros, Port Rashid,  presidido por el Queen Elizabeth II , futuro buque de paseo, o el puerto Comercial, el de Jebel Ali,  el mayor del mundo, justo en el límite  con el emirato hermano de  Abu-Dhabi. 

El Queen Elizabeth II descansa en Port Rashid. Foto Internet

También son interesantes los Parques Industriales exclusivos, como los de Dubiotech, especializado en I+D en biotecnología, Techno Park, de alta tecnología,  Dubai Silicon Oasis, Tecom etc. 

Visita de Dubai 

Como he citado antes lo más espectacular de Dubai está en su parte moderna, pero la antigua desde luego merece también un buen paseo. Vamos a hacerlo.

Tomando la Ruta ROJA del Big Bus City Tour se visita la parte clásica de Dubai, recorriendo la ciudad antigua y todo el ámbito del Creek o río. A lo largo de 10 paradas se puede descender en cada una de ellas y visitar lo más esencial del  " viejo " Dubai: Museo de Historia, el Zoco antiguo, Mercado del Oro y el de las Especias, y fundamentalmente realizar el paseo fluvial por el Creek.

La Parte Antigua   

Desde el Burjuman Mall Centre el City Tour ( parada 2 ) que nos lleva hasta el Creek Walk. Allí en media hora abordamos un barco grande, de madera, para un agradable paseo por el Dubai Creek. Este río hace un gran recodo antes de desembocar en el mar y ofrece vistas espectaculares de modernos edificios sobre la margen derecha: unos blancos, otros azules y de cristal: es la Cornisa del Creek. Vemos las Dubai Creek Towers  con las Torres Rolex, el Ayuntamiento, el City Center Megastore, los hoteles Novotel, Iconic y Radisson, etc.

Contraste de arquitectura contemporánea y los clásicos dhows en el Creek. Foto JGP

En la orilla izquierda los edificios son antiguos, en general muy bien conservados, como el Museo de Dubai que está en la Fortaleza o el Ministerio de Finanzas ubicados en una hermosa construcción. Más cerca del mar está el Heritage Village, un museo vivo de las tradiciones, con sus camellos ó barcos del desierto y la Aduana.

De regreso a la base, dejamos el barco para retomar el Bus , con el que proseguimos nuestra visita a través del Museo, el Zoco antiguo y las tiendas de textiles de los comerciantes hindúes y el Mirador de la época de los Piratas. Cruzando Al Shindagha,  túnel bajo la desembocadura del Creek, construido en 1991 y de un kilómetro de longitud, se alcanza la orilla derecha.

Allí nos espera el Zoco del Oro, imprescindible de visitar aunque menos para comprar. Dubai es la ciudad del Oro, todo él trabajado a mano. Se vende de diferentes leyes, 18, 20 ó 24 quilates; y se cobra al precio que marca el mercado mundial  en ese día, más un porcentaje por la mano de obra. 

Taxis fluviales colectivos cruzan el Creek.  Al fondo el Zoco de las Especias. Foto JGP

Muy cerca está el Zoco de las Especias y los frutos secos, en su mayoría para exportar a través del anexo Puerto de Dhows, los tradicionales barcos de madera, que son cargados de mercaderías por los costaleros portuarios. Y finalmente el Mercado de Pescado,  muy interesante y de inconfundible olor.

A través de Bahiyas Road y el Deira City Centre,  atravesamos el Puente Maktoum  para alcanzar la parada nº 3 en el Centro Comercial Wafi.  Desde aquí cambiamos de línea y tomamos el Bus Azul. Ya son las 3 de la tarde y nos queda de ver lo más espectacular de Dubai en solo 3 horas ya que el servicio finaliza a las 6.

La parte Moderna

Rodeando el Centro de Inmigración de Dubai, el bus enfila hacia la Mezquita Jumeirah.  Es la Jumeirah Road, bordeada aquí y allá por pequeñas mezquitas y que desde la parada nº 13 a la nº 17 del Bus turístico discurre en paralelo a la costa.  No sé por qué esta zona me recordó en parte a la Playa de Deauville en la costa atlántica francesa. Allí está el Centro Mercator de Danielle Morelli, el Dubai Ladys Club y el Park Jumeira Beach.

Burj Al Arab. Hotel de "7 estrellas" en Jumeirah Beach. Foto Internet

Hay que bajarse en la parada nº 15, junto al Jumeirah Beach Hotel y el Dubai Sailing Club pues en la Sunset Beach está el punto inexcusable para disfrutar del diseño exterior del  famoso Hotel Burj Al Arab, uno de los símbolos de Dubai. Es el primer hotel de “7 estrellas” del mundo. Con su forma de vela árabe al viento, se alza airoso sobre una isla artificial frente a la playa de Jumeirah. Tiene 320 metros de altura  y 60 plantas. Consta de 202 suites dobles, la mayor de ellas de 780 metros2, con una decoración impresionante de estilo árabe clásico. Tomar un té  o un café en su terraza panorámica cuesta 20 euros. ¡Se pagan con sumo gusto¡

Interesa ir andando hasta la parada nº 16, pues es una zona llena de hoteles con cuidados jardines. Nos acercamos a la famosa The Palm, urbanización exclusiva,  en forma de  palmera, en terrenos ganados al mar,  a la que conduce una gran calzada que cruza este privilegiado lugar. Comienza con una zona de residencias en  altura,  de unas 12 plantas, en color casi albero y con nombres diferentes cada una. El Metro, que corre por aquí elevado sobre pilotes, llega hasta el centro de La Palmera con estaciones circulares todas ellas con aire acondicionado. 

La exclusiva urbanización The Palm. Foto Internet

Siguen las villas situadas en cada hoja de palmera (son en total 14 hojas) y un pueblo pescador,  con precios más asequibles. Las villas, todas con acceso a playa privada, valen como mínimo 5 millones de euros, las más pequeñas, y de ahí para arriba. Estaban destinadas a deportistas, artistas, financieros y demás millonarios que quisieran descansar en Dubai. Parece ser que Roger Federer ya era dueño de alguna. Pero… ya en el año 2010 las ventas no se ajustaban a pronósticos tan optimistas.  Un gran túnel con paredes en azulejo celeste conduce hasta el Hotel Atlantis, en el extremo norte de la Palmera,  y cuyos jardines merecen un corto  paseo mientras se contempla a lo lejos el “sky line” del denominado Manhattan dubaití. 

El imponente Hotel Atlantis culmina el conjunto The Palm. Foto Internet

Con muy poco tiempo ya, tomamos el último Bus Azul en el Atlantis, de regreso al centro de Dubai. La vuelta se hace por la gran autovía Sheikh Zayed Road   ( la E – 11 que lleva directamente hasta Abu Dhabi) y paramos en el Mall de los Emiratos. Es el segundo centro comercial después del Dubai Mall, con el famoso Ski Dubai, una estación de esquí artificial de interior, de 25.000 metros cuadrados  y cinco pistas de nieve de diferentes niveles. La decoración alpina utilizada resulta un poco forzada.  

Pistas del Ski Dubai en el Mall de los Emiratos. Foto Internet

Aún nos quedaba pasear por el Wold Trade Centre, con las Emirates Towers (de  395 metros y 77 plantas ) y los hoteles “más normales” de cadenas como Fairmont, Novotel, Metropólitan, Crown Plaza ó Shangri – La. Todos ellos con originales e impresionantes diseños de los mejores arquitectos mundiales. 

Comparativa de las torres más altas del mundo frente al Burj Khalifa. Foto Internet

Y ya solo nos restaba lo más impactante: el increíble  Burj  Khalifa.  Con 830 metros de alto y 163 pisos,  es el edificio más alto del mundo. Con raudos ascensores, 57 en total, que recorren 18 metros por segundo, un minuto bastaría para alcanzar la cumbre si no hubiera que cambiar de elevadores por secciones. La visión diurna o nocturna desde su atalaya superior se supone irrepetible.

Se puede subir como visitante hasta el piso 124; cuesta unos 30 euros y es mejor reservar la hora  y turno de visita. Giorgio Armani tiene su hotel en este edificio. Diseñado y desarrollado por él, lleva su estilo inconfundible: elegante, sencillo y  sofisticado. Con 160 habitaciones, 8 restaurantes, tienda Armani y zonas de relax. 

Burj Khalifa, el edificio más alto del mundo. Foto Internet

El gran lago que rodea Burj Khalifa, refleja la torre en sus aguas y cada cierto tiempo la Fuente de Dubai – de luz y música – que lo adorna, pone en marcha su ballet acuático que inmoviliza a cualquier visitante.  Acompañan al Burj Khalifa el Dubai Mall,  el centro comercial más grande del mundo, que entre otros atractivos ofrece una pista de patinaje sobre hielo para dos mil personas y el mayor Aquario mundial. ¡¡ Es todo tan grandioso que parece un sueño ¡¡.

Sin duda nos dejamos algo y recuerdo el World Islands, un complejo residencial en construcción con forma de mapamundi de 300 islas  ( ganadas  al mar ) frente a la playa de Jumeirah. Y por último el Water Front y su Arabian Canal que intenta competir con el viejo Creek, el río de Dubai que divide la ciudad antigua que habíamos conocido por la mañana. 

The Arabian Canal en la urbanización Water Front. Foto Internet

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 AVISO A CRUCERISTAS

Para los que se animen a realizar un Crucero por los Emiratos Árabes, mi primer consejo se refiere a Dubai, puerto de embarque.  Recomiendo dos días de estancia para poder conocer bastante bien este Emirato. Y las razones son de peso.

1.- Es imposible abarcar la inmensidad de Dubai en solo unas horas. Ni siquiera en un día completo de visita.

2.- Aunque Dubai es famoso por sus nuevas construcciones, tiene una parte antigua muy interesante.

3.- Es un país en el que no hay que tener prisa. Es imposible hacer los tours y las visitas al estilo occidental, o  sea, todo muy rápido para acabar pronto y poder ver más cosas. En Dubai se vive con calma, la prisa no existe.

4.- Los centros de interés de Dubai capital están dispersos y trasladarse de uno a otro puede llevar su tiempo, siempre contando  con un tráfico fluido, cosa que no siempre es así. Visitar la ciudad es fácil pero lleva su tiempo. ¿ Como hacerlo? Veamos:

Las Excursiones del Crucero ofertan siempre una visita de Dubai, para el día de regreso del barco. Están bien pero no lo ves todo. Mi recomendación es hacer,  antes o después del crucero, una estancia de dos días (una noche) y utilizar el BIG BUS turístico de la ciudad. Tiene dos rutas:

- Ruta ROJA .- que atiende más a la parte clásica de Dubai y recorre la ciudad antigua y todo el ámbito del Creek o río. A lo largo de 10 paradas, se puede descender y visitar lo más esencial del  " viejo " Dubai: Museo de Historia, el Zoco antiguo, Mercado del Oro y el de las Especias, y, fundamentalmente hacer el paseo fluvial por el Creek.

Este paseo por el río dura una hora, pero a menudo hay que esperar bastante (incluso otra hora) para la partida del barco. Esto significa que si la ruta dura  unas dos horas, con las visitas se convierte como mínimo en 4 horas; incluso más si se pretende comprar algo interesante  en los zocos.

- Ruta AZUL.- fundamental para entender el " nuevo " Dubai. Asomarse al mar (Golfo Pérsico) y siguiendo la ruta de Jummeirah, conocer la nueva gran Mezquita, y la Playa con su parque, su Club de Damas y los impresionantes hoteles de 7 estrellas. Nos quedaría el " Manhattan dubaití“, las pistas de Ski y el Dubai Mall, que es algo indescriptible, incluyendo Burj Khalifa, la torre más alta del mundo.

La ruta azul  en si misma dura casi 3 horas y haciendo las 7 paradas posibles se requiere  el doble de tiempo. Además es aconsejable realizarla por la mañana puesto que en invierno, a las 5 comienza a anochecer y los edificios diluyen su impresionante jerarquía entre las sombras.  

Texto Julia Gómez Prieto
Fotos Julia Gómez Prieto ( JGP ) e Internet

Próxima entrega: El Emirato de Abu Dhabi